Encontré unos duraznos tentadores, enormes y perfumados que me llamaban. Cómo resistir la tentación de usarlos en alguna receta de verano, antes de que como tantas frutas (siempre las más ricas) se vayan pronto. Entonces manos a la obra y a preparar otro rico budín , esta vez con aceite como elemento graso, lo que me lleva a los sabores de la niñez, muchas dulzuras de entonces las hacían con aceite que le da un sabor y textura inconfundibles a la masa. En este caso todavía tibio lo acompañé con crema batida y lo serví de postre.
Ingredientes
Huevos 3
Azúcar 3/4 de taza
Aceite neutro 1/3 de taza
Crema de leche 1/2 taza
Esencia de vainilla 1 cdita
Harina 0000 1 1/2 taza
Polvo de hornear 1cdita
Bicarbonato 1/2 cdita
Sal 1 pizca
Duraznos amarillos 3
Batir los huevos con el azúcar hasta espumar. Agregar el aceite, la crema y la vainilla y continuar batiendo hasta integrar bien. Por último incorporar los secos tamizados en 3 veces, mezclar y colocar en molde de budín enmantecado.
Pelar y cortar los duraznos en gajos y acomodarlos cubriendo toda la superficie del budín. Espolvorear con azúcar y llevar al horno moderado por aprox 50 min.
Para acompañar batir un pote chico de crema de leche con 4 cdas de azúcar impalpable y 1 cdita de esencia de vainilla. Esto mismo pueden hacerlo reemplazando la crema por queso mascarpone.
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